¡No le gustó nada! Bad Bunny es uno de los artistas más escuchados a nivel mundial y cuenta con una gran legión de seguidores, quienes abarrotan sus conciertos. Sin embargo, muchos aprovechan su fanatismo para publicar contenido prohibido en las redes sociales, tales como las canciones del artista puertorriqueño.
Esto sucedió en uno de sus últimos conciertos y al cantante no le gustó nada, por lo cual, denunció a un fanático suyo y también le pidió una MILLONARIA indemnización por cada uno de los videos publicados en YouTube.
Bad Bunny denuncia a fan y pide millonaria indemnización
En los últimos días, Bad Bunny es el centro de las noticias en diversas partes del mundo. Esta vez no es por un nuevo éxito musical, sino por una fuerte denuncia que hizo en contra de uno de sus fanáticos.
Eric Guillermo Madronal es el acusado por Bad Bunny de grabar y publicar videos de uno de sus últimos conciertos en Estados Unidos. Este hecho fue de conocimiento del cantante puertorriqueño, por lo que no dudó en denunciar a su fanático, según información del medio estadounidense "TMZ".
El mencionado medio también publicó mayores detalles de esta demanda. Según "TMZ", Bad Bunny estaría exigiendo una MILLONARIA indemnización de 140 mil euros por cada uno de los videos que haya publicado Eric Madronal sobre sus conciertos. Pero eso no sería todo, ya que el artista también exige la prohibición para emitir el contenido libremente.
Más detalles
Según la demanda presentada por Bad Bunny, él es el único propietario de los derechos de su música EN VIVO, por lo cual, el delito que habría cometido Erick Madronal lo estaría perjudicando económica y moralmente.
Asimismo, el artista centroamericano señala y acusa a Madronal de utilizar su nombre para llamar la atención de los usuarios en redes sociales y así poder generar ingresos por temas de publicidad en su canal de YouTube.
Después de un intento inicial de retirar los videos de YouTube mediante una solicitud a la plataforma en virtud de la Ley de Derechos de Autor del Milenio Digital, Garrone logró recuperarlos. Ante esta situación, Bad Bunny decidió llevar el caso a los tribunales.
En la actualidad, todos los vídeos, excepto la presentación inicial de nueve minutos, han sido eliminados. A pesar de ello, Bad Bunny insiste en que se le indemnice con la compensación solicitada por los ingresos publicitarios perdidos.
